El pasado martes 29 de octubre tuvimos la oportunidad de asistir a la Master Class de Chucho Valdés en el Conservatori del Liceu en el marco del 45º Festival de Jazz de Barcelona y fueron dos horas apasionantes.

Su amabilidad, humildad y pasión por la música se captó desde el primer instante que salió al escenario, rompiendo la barrera con una gran sonrisa y dirigiéndose directamente a nosotros para preguntarnos que era exactamente lo que queríamos saber.

Albert Enkaminanko, profesor de percusión de “La Sala” le preguntó por los inicios de “Irakere” y ahí empezó todo, la pregunta fue como si una semilla mágica cayera en tierra fértil y comenzaran a brotar innumerables historias. Habló de grandes pianistas cubanos, que emigraron a Europa durante el S.XVIII, hasta artistas actuales como, Dámaso Perez Prado, Lilí Martinez, Emiliano Salvador y muchos otros.  De la gran suerte de ser hijo de Bebo Valdés y de las experiencias de tener a los mejores músicos de aquella época tocando en su propia casa.  De los pianistas  Bill Evans, Oscar Peterson, Herbie Hancock y Chick Corea.

Y como no, nos dejó grandes consejos:

-“Escucha, escucha y ten mucha paciencia”

-“Practica todos los días”

Nos explicó que su rutina de trabajo diaria está dividida en tres sesiones, por la mañana técnica pianística, con Hanon, escalas, arpegios y ejercicios propios que compone para ir “contra si mismo”, al mediodía, recuerda y practica Standards de Jazz y compone, y a la noche toca para si mismo.

Aquí os dejamos una pequeña muestra con distintos momentos de la Master Class.